Los gobiernos, las empresas, las instituciones financieras y las organizaciones sanitarias trabajan continuamente para reforzar su infraestructura de seguridad con el fin de contrarrestar cualquier amenaza.
El futuro de la videovigilancia mundial se ve alentador. En el año 2018, el tamaño del mercado mundial se valoró en 40.370 millones de dólares, pero según Report Linker se espera que para el año 2025 alcance una cifra estimada de 89.700 millones de dólares.
El uso de la videovigilancia está creciendo significativamente debido a la creciente necesidad de seguridad y protección, así como a la utilización de servicios de nube para centralizar la información.
Las cámaras de vigilancia del futuro
La videovigilancia por protocolo de Internet (IP por sus siglas en inglés) está diseñada para proporcionar acceso al contenido de video de una cámara de seguridad en cualquier lugar y en cualquier momento. Permite la supervisión de las imágenes de video a distancia por parte del personal de seguridad o de las fuerzas del orden.
Lucintel prevé que los sistemas de vigilancia IP seguirán siendo el tipo de sistema más importante y experimentarán el mayor crecimiento debido al creciente desarrollo de aplicaciones inteligentes para ciudades y viviendas particulares. Además, las innovaciones tecnológicas, el acceso en tiempo real, la integración de tecnologías inalámbricas, el análisis de video y el precio asequible son factores que impulsan el crecimiento de este mercado.
Se espera que el mercado mundial de videovigilancia IP alcance los 25 460 millones de dólares en 2023 y, geográficamente, se prevé que Norteamérica tenga la mayor parte del mercado, seguida por Europa y Asia-Pacífico, respectivamente.
El cambio de paradigma de la analítica de video a la analítica de video inteligente también está presentando varias oportunidades de crecimiento para el mercado, con algunas ciudades estadounidenses que ya han empezado a moverse hacia la vigilancia de imagen facial. Según contratos obtenidos por investigadores de la Universidad de Georgetown, las ciudades de Chicago y Detroit han adquirido programas informáticos que dotan a la policía de la capacidad de identificar rostros en tiempo real a partir de imágenes de vigilancia. (Chicago afirma que no ha utilizado su sistema y Detroit dice que no lo está utilizando actualmente).
EE.UU. y China intensificarán sus esfuerzos de vigilancia
La videovigilancia se adopta sobre todo en la industria manufacturera, los servicios financieros, las empresas de transporte y los establecimientos de venta al público. La incorporación de estas tecnologías de vigilancia es mayor en países como Estados Unidos, Reino Unido, China y Brasil.
Se prevé que Norteamérica mantenga su posición dominante en el mercado: Tras los atentados terroristas del 11-S, la demanda de sistemas de seguridad y vigilancia eficaces ha aumentado considerablemente en Estados Unidos.
Una de las principales tendencias observadas en Estados Unidos es la integración de soluciones de videovigilancia en el transporte. Para mejorar la seguridad del transporte en Chicago, la segunda ciudad más grande de Estados Unidos con 1,6 millones de viajes diarios, la Chicago Transit Authority (CTA) ha desplegado más de 3.600 cámaras en toda la red ferroviaria para reducir los delitos violentos y los robos.
Se espera que el uso de cámaras de seguridad también aumente en la región de Asia-Pacífico, especialmente en aquellas economías emergentes que cuentan con un número creciente de bases de fabricación, y donde la posibilidad de un atentado terrorista también es fuerte. Para el año 2020, China espera contar con 570 millones de cámaras de vigilancia que ayuden a desarrollar una base de datos capaz de reconocer a cualquier ciudadano en tres segundos.
Segmentos de mayor crecimiento
Se prevé que el sector residencial sea el de mayor crecimiento debido al elevado número de daños causados a infraestructuras o bienes durante robos y otros ataques.
La supervisión remota a través de servicios basados en la nube ha facilitado a las personas la supervisión y protección de sus hogares. La seguridad se gestiona mediante la integración de un completo sistema de videovigilancia, un control de acceso inteligente y un sistema de detección rápida de intrusos.
Se prevé que el sector del transporte sea el segundo segmento de aplicaciones con mayor crecimiento. El sector tiene una gran demanda de equipos utilizados para la videovigilancia policial, la supervisión de la congestión del tránsito y el control de multitudes. El creciente número de incidentes de seguridad en todo el mundo, como por ejemplo accidentes y atentados terroristas, ha provocado un aumento del gasto en estas áreas.